La historia de los vascos en el Uruguay es la de un pueblo que ayudó a troquelar la identidad política y cultural de la sociedad que lo acogió al tiempo que supo dotarse de una fisonomía propia en América. En Uruguay se creó el primer centro vasco del mundo en 1876, no por casualidad el mismo año en que terminó la Segunda Guerra Carlista. Uruguay vio nacer en 1887 el primer centro vasco en el cual la única lengua hablada por lo socios era el euskara. En Montevideo vio la luz una de las primeras ikastolas de América en 1925 y, el 21 de marzo de 1945, cuando la lengua vasca estaba siendo duramente reprimida en Euskal Herria, abría sus puertas en la Universidad de la República de Uruguay el primer Departamento de Estudios Vascos del continente americano, en el seno del cual se creó una de las primeras cátedras universitarias de lengua vasca de la historia de nuestro país. La identidad vasca forjada en América forma hoy parte del carácter y de la esencia del pueblo vasco, el cual vive en América su octava república. Fue tal el proceso migratorio que hoy no se entiende la identidad colectiva de la nación vasca sin el recurso de las identidades vascas de América, desde Terranova hasta la Tierra de Fuego. El pueblo vasco colaboró en la conformación de la independencia política y cultural de Uruguay como nación, al tiempo que ayudó a constituir la nueva identidad de nuestro pueblo como suma de identidades, la identidad nacional vasca del siglo XXI.